Gina Mosquera y su trabajo en Kryptón
Saber administrar es fundamental. No solamente para quienes tienen pequeños o grandes negocios, sino también para quienes están a cargo de finanzas y bienes en la estructura de una familia. Expertos en gestiones empresariales, como Henry Fayol y Michael Porter, definen la administración como una tarea de control, que implica hacer, analizar, liderar y decidir. Estos conceptos no trabajan independientemente, sino en conjunto. En Kryptón de Villa Club esto ya no es novedad, pues Gina Mosquera, la administradora de la urbanización, trabaja con un equipo que incluye a más de diez colaboradores. Su meta – desde que está a cargo de la urbanización hace un año – es cumplir con los objetivos propuestos darle a su urbanización un mayor valor económico y – por supuesto -, para mantenerla siempre como una Ciudad para Vivir.
Gina vive en Kryptón desde 2012, y su familia fue una de las primera en instalarse en la urbanización. Ella, su esposo y sus hijos buscaban un lugar agradable y seguro para vivir. Antes, vivían en el norte de Guayaquil, pero la zona se había vuelto insegura y vivían en permanente estado de alerta por la delincuencia. Cuando decidieron mudarse, recorrieron muchos proyectos inmobiliarios, pero no encontraban nada que les convenciera tanto como para cambiarse de casa. Hasta que llegaron a Kryptón, luego de que un familiar que trabaja como ejecutivo de ventas en las oficinas de Villa Club les recomendara el proyecto. “Aquí encontramos lo que no teníamos: seguridad y tranquilidad; queríamos descansar un fin de semana sin que nadie lo interrumpiera”, comenta Gina, orgullosa de su nuevo hogar. El diseño de las casas, de la piscina y el área de recreación del club social fue lo que les terminó de convencer.
Para Gina, ser residente y administradora al mismo tiempo, le ha dado la oportunidad de contribuir al desarrollo de la urbanización.
Cuando se refiere a los logros como administradora, Gina no habla en primera persona; siempre incluye a su equipo, pues cree que el trabajo se ha hecho en conjunto. La administración a cargo de Gina ha contribuido a la realización de una serie de proyectos, como los parques infantiles – que costaron alrededor de 15 mil dólares -, y el mantenimiento constante de la cancha de fútbol de la urbanización y de las zonas verdes, que cuentan con un sistema de riego automático que requiere una revisión periódica.
Para Gina, ser residente y administradora al mismo tiempo, le ha dado la oportunidad de contribuir al desarrollo de la urbanización. “Trabajar con nuestros proyectos y mantener en buen estado la urbanización beneficia a todos, sobretodo si pensamos en plusvalía”. Para ella, la construcción de un buen espacio para vivir – seguro, armonioso y cuyos bienes se mantengan en buen estado -, contribuye a que las casas tengan un mejor valor en el mercado, y por lo tanto, los propietarios que decidan vender, ganan un excedente de su inversión inicial.
La experiencia de Gina como administradora no es nueva, pues de sus 54 años, 10 los pasó como parte del personal administrativo del Guayaquil Country Club. Hoy, aprovecha esos conocimientos para contribuir a la construcción de su hogar en una de las Ciudades para Vivir.