Los postres de Orlando Cano
Llegar a casa y sentir el aroma de un dulce recién horneado es un placer que la familia de Orlando Cano disfruta a diario.
Este pastelero tiene una buena escuela. Recuerda que de pequeño disfrutaba observando a su padre en la cocina. ”Preparaba banquetes”, cuenta. Quien hacía los dulces era su abuela, una manabita de nacimiento y de corazón. Ella preparó todos los postres que le recuerdan a su infancia: cakes, pionono, amor con hambre, manjar. Desafortunadamente muchas de esas recetas se perdieron, pero Orlando logró conservar una que es especialmente importante: su cake.
Después de dedicarse toda su vida en cargos administrativos, Orlando sufrió un accidente que lo obligó a dejar su trabajo mientras se recuperaba. Para una persona que ha trabajado tantos años, quedarse en casa sin hacer nada no era una opción. Por eso, apenas estuvo mejor, empezó a estudiar pastelería, sin imaginar que en su pasatiempo iba a encontrar la forma más satisfactoria de ganarse la vida.
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Después de dedicarse toda su vida en cargos administrativos, Orlando sufrió un accidente que lo obligó a dejar su trabajo mientras se recuperaba. Entonces descubrió una pasión que se convertiría en un negocio: la pastelería.
Obtuvo su título de chef pastelero, y esto le permitió explorar su lado artístico, que durante sus años de administración se había quedado de lado. Él pone su corazón en los diseños de sus tortas y la receta especial del cake heredada de su abuela. Una de sus creaciones favoritas es la torta temática de Game of Thrones, que tiene a Daenerys, una de las protagonistas más queridas de la serie, sentada sobre el trono de hierro.
El proceso de la pastelería tiene sus cualidades terapéuticas. John Whaite, quien fue el ganador del programa en el que compiten los aspirantes a mejores panaderos y pasteleros, The British Bake-Off, asegura que hacer pan le ayuda a aliviar los síntomas de su depresión. “Hay algo del proceso de meditación en hacer pan”, cuenta Whaite en su libro Rising up. La organización Sustain realizó un estudio sobre el tema, con resultados impresionantes. el 88% de los sujetos del estudio —entre panaderos profesionales y pacientes— afirmó que el proceso les ayudó a sentirse realizados y un 87% se sentía más feliz después de hornear pan. Todo esto lo sabe Orlando Cano por su experiencia personal.
Orlando asegura que su esposa ha sido clave en el éxito de su pequeña empresa. Ella lo administra y él es el artista, así las habilidades individuales de ambos se complementan para construir un proyecto exitoso.
Desde hace 5 años, junto a su esposa Silvia Egüez —quien en ese entonces se había quedado sin trabajo— montaron formalmente su empresa familiar de pastelería y comida, que desde ese entonces ha crecido muchísimo, preparan dulces, coffee breaks y almuerzos.. Esta pareja, vive en La Estela de Ciudad Celeste. A todos sus clientes, Silvia los atiende con gran calidez y amabilidad. Para ella, el trato humano y cordial es indispensable para tener un negocio exitoso. Además, el beneficio que los diferencia es que se adaptan al deseo y al presupuesto de sus clientes, que se mantienen fieles por esta razón.
Orlando asegura que su esposa ha sido clave en el éxito de su pequeña empresa. Ella lo administra y él es el artista, así las habilidades individuales de ambos se complementan para construir un proyecto exitoso. O quizás dos: su negocio y su matrimonio, pues este 15 de julio cumplieron 27 años de casados.
Para hacer sus pedidos, pueden comunicarse al 0999547141 con Silvia Egüez de Cano.