¿Estás listo para comprar tu casa?
¿Sueñas con ser el propietario de una linda casa? Y quién no: comprar una trae la posibilidad de tener la independencia y libertad total de tomar las decisiones sobre el hogar. La primera casa es un proceso emocionante: un sueño que llega tras años de trabajo y esfuerzo. Pero, ¿cómo saber cuándo estás listo para dar este gran paso y cómo tomar la decisión correcta?
Cuando eres un futuro propietario, es importante considerar tanto la situación personal o familiar como el mercado local. Una casa propia supone varios compromisos y cuidados y los propietarios deben estar preparados para asumirlos. Por otro lado, el beneficio es muy gratificante. No hay nada como sentirse en casa en tu propia casa.
Uno de los aspectos a considerar es el tiempo de permanencia. El monto de inversión para comprar una casa es alto. Por eso, casi siempre se opta por un crédito hipotecario pagadero a largo plazo, que ofrecen tanto la banca pública como la privada. Sus plazos de pago están entre 5 y 25 años. En estos casos, la casa en sí es parte de la garantía. Cuando compras una es recomendable que sea tu hogar durante un tiempo considerable. Los esfuerzos de encontrar una casa perfecta, obtener un crédito, pagar mensualmente, mudarse, adecuar la casa para las necesidades de la familia son grandes y lo ideal es hacerlo para asentarse durante varios años. El lado positivo es que en caso de que el propietario deba salir de la casa antes de terminar de pagar su crédito, el Biess —el banco público ecuatoriano que da créditos hipotecarios a los afiliados al sistema nacional de seguridad social— permite la venta del bien hipotecado (siempre y cuando sea con una entidad financiera con la que tenga convenio). Así el propietario original puede recuperar el dinero que invirtió hasta ese momento.
Para escoger una casa hay tres factores cruciales: ubicación, precio y tamaño. Si encuentras algo que cumpla a cabalidad con dos de tres, entonces es una buena opción. Analiza si estás dispuesto a escoger algo más pequeño a cambio de una excelente ubicación a precio asequible, o si estás dispuesto a conducir un poco más para llegar a tu trabajo por una casa grande de buen precio.
Para escoger una casa hay tres factores cruciales: ubicación, precio y tamaño. Si encuentras algo que cumpla a cabalidad con dos de tres, entonces es una buena opción.
La economía del futuro propietario también debe tenerse en cuenta. Lo recomendable es buscar solo las opciones que estén dentro del presupuesto, para no extralimitarse con el costo: puede ser muy perjudicial para la economía familiar. No se trata de conformarse con poco, sino de encontrar la casa que se ajuste perfectamente a nuestra vida. Se trata de encontrar lo ideal. Las Ciudades para Vivir ofrecen múltiples modelos de viviendas para cada tipo de familia con amplios rangos de precios, al punto de que en Villa del Rey una familia con dos sueldos básicos puede tener su casa propia. Los precios de las viviendas pueden ser consultados a través de los cotizadores que permiten saber el precio exacto de cada uno de los modelos de casas de Ciudad Celeste, Villa Club, La Joya y Villa del Rey.
Como medida de seguridad, el Biess permite a los afiliados de la Seguridad Social comprometer hasta el 40% de sus ingresos netos para el pago de una vivienda. Los futuros propietarios también deben hacer este cálculo para tener claro de cuánto presupuesto disponen y no excederse. Para otorgar el préstamo hipotecario, las entidades financieras privadas también hacen un análisis de la situación económica y crediticia del comprador. Sirve para conocer su capacidad de pago. Si niegan el crédito, una posible solución es buscar una vivienda de menor precio. Además, es recomendable no sacar otros créditos o endeudarse mientras el trámite de crédito hipotecario está en proceso, porque podría ser un punto en contra.
Para otorgar el préstamo hipotecario, las entidades financieras privadas hacen un análisis de la situación económica y crediticia del comprador. Sirve para conocer su capacidad de pago.
Comprar una casa es emocionante, pero el proceso de elegirla puede llegar a ser confuso e incierto. No tengas miedo de preguntar una y otra vez hasta que todas tus dudas estén resueltas. Los temas como las tasas de interés de un crédito hipotecario, los seguros necesarios, los requisitos para aplicar a la compra de una casa, las obligaciones de un propietario no son fáciles de comprender. Siempre ten claro lo que necesitas y cuánto estás dispuesto a pagar por ello. Busca una vivienda que satisfaga tus necesidades y las de tu familia y, lo más importante, que los haga felices. Eso es lo que más importa.