La Colmena

Hace cinco años Barsa, el primer bar restaurante de La Piazza Villa Club, abrió. El local que comenzó como una discoteca karaoke, hoy es un sports bar familiar. “Los mismos chicos que hoy se toman una cerveza con los amigos, hace cinco años venían con sus padres a tomar una cola” cuenta Nahím Montiel, su dueño. Barsa ha crecido con su clientela. Este, tal vez, fue el primer punto de encuentro para el entretenimiento de los residentes de Villa Club. “Nadie se conocía con nadie” afirma Nahím, quien asegura que su bar es un referente en la zona.

Villa Club es un vecindario relativamente nuevo. Es una comunidad conformada mayoritariamente por familias jóvenes. A Nahím le llamó la atención que hace cinco años no existieran lugares para salir por las noches. Por eso se aventuró e inauguró un bar en La Piazza. “Aquí venía la gente después del trabajo y se tomaba un whisky”. Ahora sus clientes principales son los hijos de quienes iban a cantar karaokes. “La gente viene acá y no tiene que movilizarse hasta Urdesa, porque hay lo mismo y mejor” dice. Barsa se ha reinventado para estar acorde a su clientela y a las condiciones del país.

Barsa es un sitio ideal para mirar un partido de fútbol con los amigos. Para verlo, muchos prefieren pedir una torre de cerveza porque alcanza para cinco personas. Además cuentan con un menú muy variado, en el que el protagonista es el shawarma, cuya carne se asa en la entrada. Las paredes del bar tienen televisores grandes, además de un proyector. No hay mesas, hay micro salas: sillones acolchados, sofás, y butacas en un ambiente casual. Y también está la barra, en donde se disfruta de una carta variada de cócteles.

En Barsa, desde este octubre, dos veces al mes las personas podrán gozar a carcajadas asistiendo a los shows de comedia en vivo. Luego de eso se prende la pista de baile, y la pantalla con el karaoke para que la fiesta continúe.