La Colmena

El Paseo de la Fama de Hollywood contiene más de dos mil nombres de quienes forman parte del mundo del espectáculo, labrados en estrellas de cinco puntas que adornan una larga acera. Solo los mejores actores, directores y miembros del mundo del cine llegan a ese paseo. Una de esas estrellas tiene escrito el nombre de una rana: la Rana René. Jim Henson, creador de Los Muppets, probó al mundo entero que nuestro cerebro tiene la capacidad de interactuar -de la forma más humana- con seres ficticios. No solo eso, sino que además podemos aprender de ellos. La Rana René educó a generaciones enteras de niños americanos a través de su show televisivo Plaza Sésamo. No sólo interactuaba con niños, hoy uno puede encontrar en Youtube charlas de TED discutidas por el títere que encantó al mundo entero. El éxito de la Rana René se debe, en parte, porque los títeres son un magnífico recurso para entretener y educar. Es una de las herramientas más enriquecedoras porque de forma lúdica, los niños aprenden con facilidad a través de historias contadas por estos personajes de tela. Lo más complicado es armar personajes y crear una buena historia, algo que no cuesta un solo centavo. Aquí te dejamos varios tipos de títeres que puedes armar con materiales que quizá tengas en casa, o cuesten muy pocos centavos.

El más básico

Si tienes pares de medias incompletos, o muy viejas puedes utilizarlas para darle vida a un títere. Solo pone un par de botones como ojos, y lana para hacer distintos peinados. Te sorprenderás de lo graciosa que resulta.

Cucharas

No bromeamos cuando decimos que se pueden hacer títeres de prácticamente todo. Usa la parte posterior del cucharón para dibujar ojos, y boca. Puedes cortar cartulina en forma de orejas de conejo por ejemplo. Para el cuerpo hacerle un listón que parezca un corbatín.