Cómo hacer tu propia cometa
Uno de los pasatiempos que está cobrando fuerzas entre los que vivimos en las Ciudades para Vivir, es el vuelo de cometas. Por eso, aquí te explicamos cómo construir una.
La gran ventaja de vivir en Ciudades donde las calles son seguras y abundan las áreas verdes es que el barrio se convierte una extensión de casa. Las veredas, los parques y los espacios comunes de las urbanizaciones de Ciudad Celeste, Villa Club, La Joya y Villa del Rey son una extensión del patio propio. Uno de los pasatiempos que está cobrando fuerzas entre los que vivimos en las Ciudades para Vivir, es el vuelo de cometas. Por eso, aquí te explicamos cómo construir una.
La cometa es un juguete milenario. Es tan antiguo, que su origen es, hasta cierto punto, incierto. La mayoría de historiadores señalan su origen en la China antigua, hace dos mil quinientos años. Volar era un ejercicIo de meditación. Según los expertos, el legendario explorador Marco Polo llevó el artefacto desde Oriente hacia Europa. Desde entonces, su uso se esparció por todo el mundo, alegrando las mañanas y tardes de niños alrededor del planeta.
Para construir una se necesita unos cuantos materiales sencillos: una funda de plástico, 2 palos finos de madera, unos 30 metros de piola, cinta scotch, hilo para cometa, un pedazo de madera o carrete, pintura y un pincel.
De ahí, de la funda plástica corta una especie de rombo. Corta los palos del mismo tamaño que la cometa, y crúzalos para forma la estructura de la cometa. Hecha la estructura, pégala con cinta scotch a la funda plástica. Dale la vuelta, y pega con cinta justo en la intersección de los palos (donde se forma una cruz). De esta forma, el plástico estará protegido para cuando pases el hilo.
Ya tu cometa está cobrando forma. Ahora, cortar un trozo de hilo para cometas (tal vez el material menos sencillo de conseguir, aunque en muchas ferreterías hay). El trozo que cortes debe ser del doble de la altura de la cometa. Luego pasa un extremo del hilo por la parte frontal de la cometa y enrolla varias veces el centro de la estructura, vuélvelo a pasar por delante y amárralo fuertemente.
No te desanimes, falta poco: dale vuelta a la cometa y pasa el otro extremo del hilo por la parte inferior. Estira con cuidado hasta que quede tenso, ata el hilo. Ahora, voltea la cometa. Pasar el otro extremo del cordel por la parte inferior de la cometa y estirar con cuidado hasta que quede tenso. Ese conjunto de hilos se llama brida, y sirven para conectar a la cometa con el hilo de vuelo (que es el que sostendrás en la mano mientras juegas con ella). Ata el hilo de vuelo a la brida, un poco más arriba del centro, ajustándolo cuando eche a volar la cometa.
Ahora viene la parte menos técnica y algo más artística: decorar la cometa. Usa la pintura que has comprado, y puedes usar agua con detergente para que se seque mejor en el plástico.
¡Finalmente! Haz la cola: la cola es la tira larga de plástico que le da estabilidad a la cometa. Tiene que tener cinco veces la altura de la cometa.
Eso es todo, ¡feliz vuelo en las Ciudades para Vivir!